Dieron empleo a numerosas mujeres entre 1.970 y 2.012. Elaboraron prendas para firmas de moda de todo el país, incluido El Corte Inglés.
Todo comenzó en diciembre de 1.969, cuando un grupo de veinte mencianas, mayores de 18 años, completaron un curso de corte y confección, impartido por dos monjas, en el colegio de la orden religiosa “Cristo Rey“, actual castillo. La iniciativa se llevó a cabo a través del programa de Promoción Profesional Obrera (PPO). En los años sucesivos se impartirían más, como el destinado a la “Promoción de la mujer campesina”, en 1971. El objetivo era capacitar a las mujeres de la localidad para trabajar en talleres de costura. Era el germen de un sector que durante cuatro décadas dio trabajo a numerosas mujeres de Doña Mencía.
Dominga León y María Cubero, fueron algunas de las primeras vecinas de nuestro pueblo que comenzaron a ganar un sueldo en el taller que pusieron las monjas en el colegio de Cristo Rey. Al principio, confeccionaban prendas para alguna tienda local, hasta que en el año 1.972, las religiosas compraron máquinas industriales y comenzaron a trabajar para firmas de distintos puntos del país. “Comenzamos trabajando muchísimo y ganando muy poquito,” recuerda Dominga.
En 1.977, las monjas fundaron la Cooperativa de Confección y Artesanía Menciana, que daba empleo a unas 25 mujeres. No obstante, en torno a 1982, las religiosas se fueron de Doña Mencía y las trabajadoras se quedaron al frente del negocio. Allí continuaron cosiendo mujeres como Paqui Priego, que explica, entró a trabajar con 15 años.
Dominga y María fundarían después otro taller con el que atendieron la gran demanda de trabajo que les llegaba: Confecciones León y Cubero. “Los primeros años mal, pero luego íbamos bien, se ganaba un poquito más. Las mujeres hasta se casaban, tenían sus hijos y seguían trabajando,” recuerda Dominga.
Por su parte, Mari Muñoz recuerda el curso de confección que, en 1.980, impartió la Agencia Comarcal de Extensión Agraria, ya a través del Instituto Nacional de Empleo (INEM). Esta agencia realizaba acciones para formar a las mujeres rurales y fomentar el cooperativismo. Ella y varias compañeras asistieron con la idea de fundar Bercoin, Bermejinas Confecciones Industriales.
En esta entidad trabajaron también mencianas como Rosalía López, Isabel Córdoba y Carmen Rosa. Esta última ha explicado, en Onda Mencía Radio, que el Ayuntamiento les dejó el actual edificio de la guardería para que montaran allí un taller. “Fue la ilusión de once mujeres jóvenes, con muchas ganas“, destaca Muñoz.
Comenzaron elaborando los uniformes de los niños que salían de legionarios en el municipio, en Semana Santa. Después, confeccionaron prendas para entidades como El Corte Inglés. Además, solicitaron un préstamo de 4.400.000 pesetas al Fondo Nacional de Protección al Trabajo con el construyeron su nuevo taller, en la calle Ramón Medina. “Fuimos todas a Córdoba,” recuerdan en alusión al día que formalizaron el crédito.
La Cooperativa de Confección y Artesanía compró después esas nuevas instalaciones a Bercoin, donde continuó funcionando hasta 2012. Fueron años en los que, tal y como explican, el sector decayó consecuencia de clientes que no les pagaron lo que debían y también de la llegada de mano de obra de menor coste. Ambos condicionantes, indican, acabaron con la rentabilidad de estos talleres, que a tantas mujeres dieron trabajo en Doña Mencía años atrás.