La nueva ordenanza pretende evitar abusos en la captación de agua. A partir del 16 de marzo los agricultores podrán solicitar y entregar la documentación para recibir un máximo de 5m3 por hectárea de olivar al año, a un precio de 1€ el m3.
Durante el pleno del 6 de marzo, la corporación municipal aprobó por unanimidad, la nueva Ordenanza Reguladora de los Puntos de Agua para Uso Agrícola y Ganadero de Doña Mencía. El texto cuenta con el visto bueno del Consejo Agrario Municipal y está abierto a futuras actualizaciones para incluir las sugerencias que vayan aportando los beneficiarios, siempre que así lo estimen desde el consejo y los grupos políticos de la corporación.
Son tres los puntos de agua existentes en la localidad: dos frente al Pabellón de Deportes y uno en el Pilar de Abajo. En ellos se establecerá un nuevo método de control del suministro, que entrará en vigor una vez termine el periodo de tratamientos. Un equipamiento informático controlará a partir de entonces cada punto de agua. El sistema requerirá de hecho que los usuarios marquen un número de identificación y contraseña que les facilitará el Ayuntamiento.
Los propietarios de fincas ubicadas en el término menciano y los empadronados en Doña Mencía que posean tierras fuera de este término, podrán solicitar agua para uso agrícola (incluidos tratamientos, riego de plantones, huertos) y ganadero. Para ello, a partir del 16 de marzo, podrán pasar por el Ayuntamiento a recoger su solicitud o pedirla a través de correo electrónico a ayuntamiento@donamencia.es. Tendrán que aportar a su vez, la Declaración de Cultivo, o cualquier otro documento que acredite la titularidad o arrendamiento de la explotación, y su extensión.
A las explotaciones de olivar se concederá un máximo de 5m3 por hectárea y año, con un precio de 1€ el m3. Cada usuario podrá solicitar y abonar la cantidad de agua que estime oportuna, sin sobrepasar el límite indicado. El Ayuntamiento valorará además cada petición para riego de plantones, huertos y uso ganadero. Esta nueva ordenanza pretende evitar abusos en la captación de agua, así como los usos inadecuados, evitar la especulación y venta de agua o que sea captada por vecinos de otras localidades.